9/4/12

CONCLUSIÓN


Esta entrada pretende servir como finalización del trabajo y para resaltar que para completar una introducción del juego tradicional en la clase que vaya más allá de la puesta en práctica en cada momento del juego en cuestión, sería conveniente desarrollar una labor de investigación sobre el origen y evolución de los juegos basada en fuentes primarias (preguntas a familiares de los niños) y secundarias (bibliografía, etc.), variantes que presentan cada uno de ellos así como los objetivos que se consiguen o se pretenden alcanzar también con cada juego concreto a través de su puesta en práctica. Toda esta información podría completar unas fichas a modo de catálogo. Si bien es cierto que podría haberse incluido dicha aportación en las entradas del blog referentes a los juegos, esto hubiera sobrepasado los objetivos del trabajo encomendado y se ha optado por ofrecer una sucinta descripción de las reglas de cada juego. Antes de recordar a modo de corolario, mediante una breve exposición la finalidad de este blog, es necesario mencionar que las imágenes, vídeos y demás inserciones utilizadas se han  encontrado en la red tras búsqueda con Google y se emplean simplemente con fines de ilustración. Además,algunas fotografías se han extraído del fondo legado por la Fundación Martínez Guerricabeitia a la Biblioteca Valenciana y la información sobre los juegos internacionales se ha obtenido del cuaderno del profesor editado por Casa Mediterráneo con motivo de su proyecto de Juegos Tradicionales Infantiles del Mediterráneo en Abril del 2010.

La incorporación de los juegos tradicionales al currículum pasa por un análisis previo de la motricidad de los alumnos así como también de la idoneidad de los juegos (evitando prejuicios y sexismo) sin olvidar que el objetivo fundamental del proceso educativo es la formación de personas, desarrollar su aprendizaje y promover sus capacidades para comportarse como seres activos y participativos en la comunidad. Una de las mejores maneras de alcanzar ese fin es favorecer el crecimiento personal del alumno ya que cada individuo posee aptitudes y actitudes intrínsecas que lo diferencian del resto y potenciar la creatividad, algo que se consigue a través de elementos que aporta el juego popular. Las actividades físicas colectivas que comportan muchos de ellos facilitan las relaciones interpersonales, la integración y el respeto, funcionando como mecanismo de aceptación y entendimiento de las diferencias y resultando decisivas como contribución al desarrollo de la cooperación y la solidaridad. La elaboración y aceptación de las normas conlleva aprender a convivir y las actividades que desarrollan habilidades motrices requieren asumir tanto las diferencias como las posibilidades y limitaciones propias y ajenas. Si bien es cierto que las acciones competitivas pueden generar conflictos, también es cierto que la resolución de las mismas podemos basarla en el diálogo, transformándose aquellas en algo positivo. La autonomía y la iniciativa personal se pueden ver respaldadas por la organización individual y colectiva de los juegos. Desde la inclusión del juego como medio educativo tratamos como fundamentales el esfuerzo personal y las relaciones con el grupo, favorecemos las relaciones personales positivas y recuperamos el tiempo de juego en la infancia así como abarcamos la transversalidad que supone la propuesta. Proposición que termina por abordar aspectos relacionados con la competencia lingüística (aprendizaje de vocabulario específico del juego, intercambio comunicativo que se produce durante el mismo), con el fomento del juego cooperativo donde se potencia el respeto por las normas del mismo, la aceptación del éxito de los demás y la resolución pacífica y negociada de los conflictos (Educación para la Paz), la promoción de actividades co-educativas, la transmisión de valores vitales para desempeñarse en sociedad como los de colaboración, solidaridad, respeto, y esfuerzo (Educación Moral y Cívica) e, incluso, incide en la Educación Intercultural si elegimos introducir juegos de otros países como método de acercar culturas y de atención a la diversidad (llegando de pleno al campo de las necesidades educativas especiales). Todo ello puede ser tratado con una herramienta de baja complejidad, sin exigencias técnicas ni de reglas complicadas y que, en muchas ocasiones, ni tan siquiera requiere de equipamiento manufacturado y que, si es necesario, se puede adaptar a las características del alumnado.



En definitiva, desde esta bitácora se pretende utilizar el juego tradicional  como medio pedagógico multidisciplinar que mejore el proceso de enseñanza-aprendizaje considerado éste como desarrollo integral, esto es, cognitivo, afectivo y social. Entiendo que desde posiciones lúdicas este tipo de juego sirve, además de para evitar la rutina, como mecanismo de aprendizaje sencillo por su fácil acceso al acomodarse a las características tanto personales del niño como del contexto social y cultural (admiten variaciones para adaptarse a las necesidades individuales y de espacio, por ejemplo). También por su variabilidad y accesibilidad funcionan como instrumento de atención a la diversidad y facilitador de la integración. En parecido sentido, es destacable su capacidad para favorecer la socialización y el conocimiento de los iguales y su característica como potenciador de la co-educación, las relaciones interpersonales ( no ya solo entre los que juegan sino también se podría plantear una investigación en la que el niño preguntara a sus padres y abuelos a qué jugaban cuando eran pequeños de manera que se fomentara el vínculo personal intergeneracional), el trabajo en grupo y/o por parejas y la comunicación e inserción social, sin olvidar que actúan como estímulo de la cooperación. Y todo ello  propiciando un tiempo de disfrute y diversión. Valga como ejemplo de la interdisciplinariedad de la propuesta el considerar las materias de Lengua, Matemáticas y Conocimiento del Medio: en la primera el juego nos sirve para que el niño conozca y utilice el vocabulario propio del mismo y para que desarrolle su expresión oral y/o escrita por explicar las normas a seguir, respecto a la segunda el juego nos puede introducir en el conocimiento de los números y las operaciones así como nos puede ayudar a presentar los conceptos de figuras, formas y dimensiones (a través del campo de juego) y, para la última, a través del juego se puede producir el descubrimiento del propio cuerpo y la participación en actividades de grupo que permite adoptar un comportamiento constructivo y de respeto por los demás compañeros.



LA TXILA

Este juego, practicado en Argelia, requiere balones blandos (de gomaespuma, por ejemplo). Se hacen dos grupos de igual número de jugadores. El equipo A se agrupa en parejas y tienen que lanzar una pelota a los jugadores del equipo B, sin soltarse de las manos. Los que van siendo alcanzados por la pelota, se eliminan. En el momento que todos los jugadores han sido tocados, se intercambian los roles.


TRI

Juego albanés cuya denominación significa Tres y que para poder practicarlo nos es necesaria cinta adhesiva o tiza. Se delimita un espacio a modo de isla y se elige a tres “vigilantes”. El gran grupo corre libremente por el espacio acotado, intentando no ser cogidos. Si los perseguidores les atrapan, irán a la isla. Solamente podrán ser salvados por el último jugador que quede sin coger. De ser así, comienza el juego con los mismos perseguidores. Si los tres vigilantes consiguen atrapar a todo el grupo, en la próxima partida los tres primeros que fueron capturados harán el papel de perseguidores.


EL ZORRO Y LA GALLINA

Juego practicado en Turquía por el que los participantes eligen a un jugador que hace de zorro y marcan un cuadrado que servirá de guarida. Otro jugador será la gallina, y el resto del grupo, los polluelos que se cogerán a la gallina por los hombros. El zorro se acerca a la gallina y pregunta el nombre del último de la fila, y la gallina lo rechaza. Ésta intenta evitar que el zorro coja al último polluelo. Cuando esto ocurre, lo lleva a su guarida y vuelve para capturar al polluelo siguiente. Mientras tanto, la gallina puede salvar a los polluelos capturados, pasando por la guarida y tocándolos. Estos deben permanecer dentro de la madriguera pero pueden estirar los brazos para facilitar el trabajo a la gallina. Una vez que son salvados, corren a unirse a la fila de los polluelos. El juego termina cuando el zorro ha capturado a todos los polluelos, o cuando la gallina tiene un solo polluelo y los recupera a todos de una vez.


SKOLA

Variante de nuestra Rayuela practicada en Bosnia.Se pintan ocho cuadrados en el suelo. Cada jugador utiliza una piedra llamada plova, como marcador. El juego son ocho rondas. En la primera, el jugador lanza su plova al cuadrado uno. Salta a pata coja, toma la plova, y continúa por el resto de los cuadrados en orden, acabando en el cuadrado ocho y saltando hacia fuera. En la ronda siguiente, el jugador tira su plova al segundo grado, salta por todos los cuadrados como en la ronda anterior y así hasta completar los ocho cuadros. Se considera fallo cuando lanza fuera la plova, cuando pisa la línea o cuando pone ambos pies en el suelo. Cuando alguien comete una falta, pierde su vuelta, pero puede comenzar en el mismo nivel del grado donde se quedó.